Resumen de opiniones
Con el crecimiento constante de la economía china, la industria de alimentos y bebidas del país ha experimentado un sólido crecimiento en los últimos años, y el tamaño del mercado ha pasado de 3,6 billones de RMB en 2016 a 4,7 billones de RMB en 2019, con una tasa de crecimiento anual compuesta del 9,3%. Sin embargo, la aparición de la epidemia de 2020 ha arrojado una nube sobre el sector de la restauración, que por lo demás está creciendo rápidamente. Las medidas de cierre de la epidemia que han surgido en todo el país han limitado en gran medida la clientela del sector de la restauración, y entre los factores catalizados por la epidemia se encuentra también el alto coste de las materias primas y la mano de obra. En este contexto, muchas grandes cadenas de restaurantes con modelos de tiendas grandes han empezado a reducir su carga perfeccionando sus operaciones o reduciendo sus modelos de tiendas para hacer frente a la presión que supone la epidemia. Al mismo tiempo, las cadenas de restaurantes, conocidas por sus modelos de tiendas pequeñas, han demostrado una mayor resistencia frente a la epidemia.
La aparición de la epidemia tendrá un impacto en toda la industria de la restauración, ya que el tamaño del mercado de la industria de la restauración de China caerá aproximadamente un 15% interanual en 2020 y la industria de la restauración se enfrentará a una importante remodelación
La aparición de la epidemia de 2020 ha perturbado considerablemente el sector de la restauración, que había crecido a un ritmo vertiginoso. El cierre de la epidemia en muchas partes del país ha tenido un gran impacto en el tráfico de los restaurantes, lo que ha provocado que muchos de ellos no puedan soportar la presión operativa. Según los datos de la CCFA, el número total de establecimientos de restauración chinos en 2020 fue de 6,53 millones, lo que supone un descenso interanual del 11%.
Catalizado por la epidemia, el aumento significativo de varios costes de explotación de la restauración, como las materias primas y la mano de obra, ha supuesto una carga aún mayor para el sector de la restauración, que ya estaba sufriendo por el lado de los ingresos
La epidemia ha provocado un fuerte descenso de la afluencia de público fuera de línea, mientras que el debilitamiento de la macroeconomía también ha provocado un descenso del gasto de los consumidores. Al mismo tiempo, el estancamiento económico causado por la prolongada inflación mundial se ha reflejado en la producción. El precio de las materias primas, los costes de la mano de obra y otros gastos han aumentado, lo que supone una mayor presión para los hosteleros