El foco de atención del comercio mundial se está desplazando gradualmente de la restricción financiera a la demanda real. Tanto el índice del dólar como los rendimientos de los bonos estadounidenses volvieron a caer en importantes líneas de tendencia a finales de octubre.
Los mercados de valores extranjeros han tenido un buen comportamiento desde octubre, y el valor ha superado al crecimiento, mientras que las acciones A y H han sido más débiles.
La confianza de los consumidores en el extranjero ha tocado fondo a medida que la inflación se ha ido recuperando, con Estados Unidos por delante de Europa en este camino. Los residentes en Estados Unidos no están muy apalancados y la probabilidad de un aterrizaje brusco es baja.
