En resumen
El Jefe del Ejecutivo de la RAEHK, Li Ka-chiu, pronunció su primer discurso político tras su toma de posesión, en el que expuso su visión del desarrollo de Hong Kong en los próximos años. Según Li, la aplicación plena y precisa del principio "Un país, dos sistemas" garantizará la prosperidad y estabilidad a largo plazo de Hong Kong, salvaguardando al mismo tiempo la soberanía nacional, la seguridad y los intereses de desarrollo. En general, el orden y la seguridad se han restablecido en Hong Kong desde la promulgación de la Ley de Seguridad Nacional. Li señaló que Hong Kong podría construir una sociedad armoniosa y pluralista aprovechando su "proximidad a la patria y su conectividad con el mundo". En su discurso político, expuso una serie de políticas para hacer frente a los retos que plantea el desarrollo de Hong Kong, entre ellas crear un impulso para el crecimiento económico, planificar el desarrollo post-epidémico, aliviar la presión sobre la vivienda, atraer el talento y abordar los problemas sociales y de subsistencia.
En un entorno en el que la epidemia de COVID-19 hace estragos, el riesgo de recesión mundial aumenta debido a la elevada inflación, la liquidez se estrecha y la crisis geopolítica se intensifica, la recuperación económica de Hong Kong tiene un camino lleno de baches. Creemos que las políticas anunciadas por Li Ka-chiu en su Discurso Político, cuyo objetivo es estimular la economía local, contribuirán a mejorar los medios de vida de la población, a liberar el potencial de desarrollo del suelo y la vivienda y a mejorar la competitividad de Hong Kong.
Dado que los sectores de Hong Kong están acelerando su recuperación y el consumo se dirige hacia la normalización, junto con la mayor relajación de las restricciones a la inmigración, el impulso del crecimiento de Hong Kong seguirá aumentando en los próximos trimestres. Al mismo tiempo, las medidas de estímulo fiscal contribuirán a apoyar a los sectores relacionados con el consumo minorista, a proteger el empleo y a aliviar la carga de los ciudadanos. Se espera que el Gobierno de Hong Kong siga comprometido con la mejora de la competitividad de la ciudad, abordando los retos económicos y aumentando gradualmente su fortaleza económica durante los próximos cinco años y más allá.
