En las actas de la reunión del FOMC celebrada en marzo, los funcionarios de la Reserva Federal convinieron en que la contracción de los balances debería comenzar en mayo lo antes posible, habida cuenta de la elevada inflación y las tensiones en el mercado laboral. La reunión prevé un máximo mensual de 95.000 millones de dólares (60.000 millones de dólares en bonos del Tesoro y 35.000 millones de dólares en MBS). Recientemente, Brad y otros funcionarios han hablado con frecuencia, lo que significa que están abiertos a la reducción de la escala lo antes posible. Esta vez hay muchas diferencias en comparación con la tabla de rotación anterior, que comenzó en 2017. En primer lugar, se prevé que el límite máximo de la ronda actual se duplique con respecto a la ronda anterior, en consonancia con el tamaño actual de los activos totales de unos 9.000 millones de dólares. En segundo lugar, la tabla de encogimiento de la ronda anterior se lleva a cabo de manera pasiva (no renovada), la tabla de encogimiento de la ronda actual o principalmente de manera pasiva, pero no excluye la venta activa. En tercer lugar, el ritmo, el ritmo de reducción o obviamente más rápido que la ronda anterior, en comparación con la ronda anterior tardó un a ño en alcanzar el límite superior de la escala de reducción, la ronda actual o el más rápido se ajustará a un máximo de 3 meses. En cuarto lugar, las condiciones son más maduras, esta vez la Reserva Federal establecerá un instrumento permanente de recompra para garantizar la liquidez del mercado en la medida de lo posible. Las operaciones de reducción de la Reserva Federal han sido más directas en el aumento de las tasas de interés a largo plazo de los bonos, con tasas de interés a 10 años y diferenciales a plazo considerablemente más altos desde que se publicó el resumen. A juzgar por los resultados del mercado durante la última ronda de contracción, es probable que el impacto de la contracción en los mercados emergentes sea mayor que el aumento de las tasas de interés.